Para escribir una carta, tomo una hoja y un lápiz.
Pero tiene que ser lápiz, no pluma, no plumón; un lápiz que tenga la punta afilada, para que conforme escriba se vaya achatando y luego, al deslizar un poco el lápiz, vuelva a escribir finamente. Escuchar como junto al sonido al deslizarse sobre el papel van brotando las ideas, como nacen en la mente e inmediatamente fluyen entre los dedos para quedar plasmadas en el papel.
Los tachones nunca faltan pues las ideas también pueden cambiar de repente, haciendo que la frase o una simple palabra que hacía solo dos segundos parecía correcta ya no lo sea mas, y prefiero tachar que dejar un feo borrón en el papel, aunque sea solo un borrador, la verdad es que me chocan los borrones, no nos llevamos bien y prefiero empezar de nuevo, que dejar una mancha sobre la perfecta hoja en blanco, aunque repito, solo sea un borrador, lo mas probable es que lo guardare y si algún día rebuscando encuentre la carta, no querré ver manchas en ella.
Dejar que las ideas broten, escribiendo, tachando y remendando, hasta que siento que termine, entonces, releo todo lo escrito y tomando una hoja nueva, procedo a copiar la carta, para así poder ser enviada.
5 comentarios:
¿Sabes? a mí también me gusta mucho escribir con lápiz. Y me ha gustado mucho tu post. Ahora viene mi parte. Espero encontrarte (ahora sí en la noche) tenemos que ponerle nombre a este proyecto, ¿no lo crees? :D
Abrazo
Ahora ya casi nadie creo envía cartas las ultimas que yo envié fueron a ti y a katty jejejeje :D pero es bonito poder leer algo que otro persona escribió de su propio puño y letra ^^
Bueno ya vi de que toca escribir esperaré mi turno. Saludos!!!!
por acá no ha cambiado nada,mana!!
te quero woanga!
creo que tal como carta carta, nunca he escrito una, pero no sé ya escribir una carta, me doy pena a mi mismo
Desde que se inventó hotmail casi no escribo cartas.
Me propondré volverlo a hacer, porque ay pero que bonito era!!
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