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Todos los lugares y todos los recuerdos y todos los sabores y todas las memorias y colores y olores y sensaciones y sonidos sirven para invocarte a ti.  A ti te he cantado mil canciones, te he dado mil veces las gracias, te he alabado en mil salmos.  No he vivido sino para ti, como viven las enamoradas, como viven las locas, como viven las mujeres.  Me he aferrado a ti sin saber lo que ocurre en el mundo, sin esperar nada, como las enamoradas, como las mujeres.

Yo me convertí en eso que tú querías, una apasionada, una loca, una enferma, llena de ímpetus y languideces, pasiones y ternuras, alegrías y calmas.  Fui dos mujeres, diez mujeres para ti.  Fui la aventurera y la que te quería retener, la ansiosa, la ridícula, la melancólica, la intensa, la sublime, la agitada, la poseída, todo eso fui.

fragmento "Demasiado Amor"